miércoles, 26 de diciembre de 2012

Bienvenido al cielo.

Después de sobrevivir al fin del mundo, carretera y manta hacia Valencia. Llegar al pabellón sin perderme me resultó más fácil de lo normal, y no asustarme al ver a 30 personas en la cola a las 12:30 de la mañana también. "Qué poca gente para un fin de gira" y empezó la investigación sobre la cola de grada (vaya putada) pero en fin, que éramos las primeras de la cola, qué raro, ¿no? Ya solo quedaban 9 horas para que se abriese el cielo... 14:30h. Se nos acerca alguien por la derecha, con sombrero y barba, nos dice un "¿Cacéis ahí?" y al levantar la cabeza tenemos a Kutxi delante, mirándonos con cara de no haber visto nada así en la vida. Sobra decir lo genial que es. Y también sobra decir que cada vez que íbamos al bar a mear estaba él allí con su barba y su sombrero y se hacía más amena la cola. 
¿Sabéis cuando vais a un concierto y os equivocáis al correr y cogéis para el sitio que no toca? Pues eso nos pasó a nosotras y al final acabamos no demasiado mal. Lo menos mal que se podía, estando en la grada, claro. Teníamos al lado a unos señores que eran los padres de Kutxi, y los primos y toda la família, muy graciosos y muy majos también. Pero eh. 22:00. Puntualidad máxima, se apagan las luces. 
El rubio empieza a aporrear la batería y empiezan los primeros acordes de Bienvenido al secadero. El cielo empieza a abrirse y dejarnos entrar, hasta dentro del todo, seguidos de La majada. Pero es que cuando la tercera canción es En tu agujero y te viene a la cabeza el Robe, ya no es que se abra el cielo, es que estás dentro de él, saltando de nube en nube. Cuando de repente, así porque les da la gana, meten en el repertorio La luna me sabe a poco ya me acabo de morir, no sé si me dan espasmos o qué, pero algo así, muy de locos, muy de mi. "El mejor concierto de la gira fue aquí, en Valencia, por eso hemos decidido acabar la gira en el mismo sitio" El concierto siguió en esa línea, El Piñas apareció a la hora y media a cantarse sus ya típicas Con la camisa rota, Alfileres y Trasegando y hubo sorpresas como El Flako de Txarrena, Juanito de Bocanada y algunos compadres más subieron al escenario. Volver a escuchar Barniz, La rueca, Que se joda el viento o la adorada Corazón de mimbre... Es algo que no puedo conseguir explicar con palabras. Escuchar por primera vez en directo Mil quilates, con Kutxi imitando la voz de Evaristo, es simplemente increíble. Se pasó el concierto entre bailes de Kutxi, fandangos, villancicos y demás ocurrencias de este señor... A mi me dolía mucho el corazón, no había sonado Duerme conmigo y a la hora de Como los trileros, buscaba a Martín con cuarenta mil ojos puestos en el escenario, pero la voz de bronce no apareció y la espina se quedó clavada.
Cuando llega la hora de las presentaciones duele, duele ver que llega el final. Kutxi va presentando en orden al rubito, Alén, al Piñas, César y Kolibrí "A este señor y a mi nos ha crecido el bello púbico juntos, señores. Que no bello público, bello público son ustedes". (A mi decidme lo que queráis, venid con tecnicismos, con historias de mierda o con vuestros propios gustos, pero para mi son los mejores músicos del mundo) Después de la presentación llega la sorpresa de la noche. En la pantalla principal aparece un video de gente muy bien felicitando el XV aniversario. (Yosi, Loquillo, Fito, Rosendo, El Drogas, Brigi...) Kutxi con lágrimas en los ojos daba las gracias y nos cantaba Como el viento de poniente, El perro verde (bajándose a la primera fila a cantar con la gente) y... nos contó la bonita historia de Motxila21, historia que muchos seguimos, e invitaron a Ibai (M21) a cantar y cerrar el concierto con Marea. Ay, quién pudiera... Y bueno, ya se sabe, que si no nos volvemos a ver, que sea por su culpa.





Texto:

viernes, 21 de diciembre de 2012

Que el fin del mundo te pille bailando

Nadie cree en el fin del mundo, pero si hoy fuera el último día de tu vida,
¿qué querrías estar escuchando?

 1. Angie - The Rolling Stones
When will those clouds all disappear? 


 2. Los mismos clavos - Marea
Mi casa está donde estás tú...


3. Segundo Movimiento: Lo de Fuera - Extremoduro
Vente a la sombra, amor, que yo te espero


4. Y sin embargo - Joaquín Sabina
Sabes mejor que yo que hasta los huesos solo calan los besos que no has dado.



5. Llévame al baile - Pereza
 
Si aún dices venga, yo digo vale. 



6. Teniendo Nada - Forraje
 
Vivo de ilusiones y me sobra corazón. 



7. Le voy a cobrar a tus labios tus miradas - Sínkope
Y poder vestir con tu sonreír mis raídos rincones...



8. Aunque tú no lo sepas - Quique González
Aunque tú no lo entiendas, nunca escribo el remite en el sobre... por no dejar mis huellas.



9. La Guadaña - Bocanada
 
Traigo carretas entera de horas para ti.



10. Trampas al Sol - La Fuga
Vamos a fumarnos la ciudad. Vamos a bebernos tú y yo el mundo...



11. Come as you are - Nirvana
Come as you are, as you were... 



12. Manos de trapo - Albertucho
Presente a la vez que impresentable.



13. Supongo - Rafa Pons y Andrés Suárez
Cómo explicarte que a menudo me despierto borracho en los portales
y, aunque no sé ni mi nombre, sé que quiero abrazarte...



14. A la luz de una sonrisa - Gritando en Silencio
Ella merece más una letra que las calles de Madrid.



15. Valiente - Vetusta Morla
Bailaré hasta que esto acabe.


Por
Marta @Killmys0ul
Isa @MgFluorescent

martes, 18 de diciembre de 2012

Canciones del Segundo Origen.

Aún quedamos unos cuantos en el mundo a los que nos hace ilusión la salida de un disco, y esto siempre lleva una especie de ritual detrás. Primero van los días, semanas o meses, desde que se anuncia el disco hasta que sale a la venta. Después, la primera escucha, la importante. Siempre habrá alguien que diga que las primera impresiones no lo son todo, y claro que no lo son, pero la primera vez es la decisiva. Después vienen todas las demás, cuando decides que canciones te gustan más, analizas las letras, les das el significado que te da la gana (sí, tú también lo haces) y, más tarde, si eso, lo comentas.
Pero hoy no he podido resistirme y, después de escuchar el segundo disco de los Exceso, por primera vez, he sentido la necesidad de contarlo.

Los descubrí el año pasado, cuando Dani Marco los mencionó en una Tuitcam, junto a más grupos -gracias, Dani-. Pasaron los días y pasé del tema, hasta que un día encontré un post-it con su nombre y abrí Spotify. Me costó unos minutos asimilar lo que estaba pasando. Era uno de los grupos. Os cuento, los Exceso resultaron ser uno de esos grupos que sabes que vas a escuchar hasta rayarlos, que te gustan desde el primer acorde y que te van a acompañar en el mp3 durante mucho, mucho tiempo. No es algo que me pase normalmente, suelo descubrir las bandas poco a poco, hasta que me acaban gustando de verdad, y no así. 

Hoy, dieciocho de diciembre, sacan su segundo disco. Al principio, no quería hacerme ilusiones. Hay muchos grupos que empiezan con muchísima fuerza y en el segundo cd la cagan. Pero, afortunadamente, no es el caso. Canciones del Segundo Origen me ha gustado de principio a fin, desde Segundo Origen hasta Delirios (lo del wc sound me ha ganado), pasando por La Mano de Barrocon el eterno dios de dioses, Kutxi RomeroRojo Arteen una versión diferente a la del videoclip, con El Piñas (pa' qué decir más); La Voz DormidaSaldrá Mejor; Cazo, con un rollo más lento, la preciosa voz de Dani Marco -gracias otra vez, Dani- y una letra mejor aún ("cuando mires hacia atrás y el infierno no te duela, da rienda suelta a tu sonrisa y yo traeré la primavera..."); Delirios, en versión eléctrica; El Hambre y la Raíz, una de las que más me han gustado en la primera impresión; y, por último, Exceso.

Exceso es un grupo que hay que escuchar. Obligatoriamente. Y que van a dar mucho que hablar porque, qué queréis que os diga, son unos tíos muy grandes





Os lo cuenta
Marta @Killmys0ul

viernes, 14 de diciembre de 2012

Arenas movedizas

Yo recuerdo que algunas mañanas de domingo, mis ocho años y yo trasteábamos entre los CDs de mi hermano, buscando "Usar y tirar" para escuchar Llamando a la tierra o Quédate a dormir. Su anterior CD (Para no ver el final) ya me voló la cabeza de forma considerable (es que la voz de Tarque no es de este planeta, qué va). Pero bueno, voy a intentar contaros de forma totalmente subjetiva y pava qué pasó por mi cabeza cuando escuché "Arenas movedizas".
La canción que abre el CD es Para decirte adiós. Me recuerda todo el rato a canciones del disco anterior y un buen rollo me recorre al escuchar su letra "para volver a ser yo, para decirte adiós" (muy en plan "eh, que te jodan"). Sigue Vidas desiertas y cómo me gusta esta canción, sin duda una de las que más. Es sin duda esa canción que todos (bueno, yo) queremos escuchar en medio de una infinita carretera con el sol calentando el cristal de las Ray-Ban. La tercera canción es el single del disco, Escucha mi voz, y es como un grito, una llamada de atención., un "oye, estoy aquí, sigo aquí". He de decir que yo haría caso a la letra y me pasaría la vida escuchando su voz. Después llega Cuando el camino duela que sigue con ese rollo sureño que engancha, muy en su linea. Ahora llega la que es para mi otra de las joyas del repertorio y lo digo con toda certeza. Noche de aullidos no es solo una de las que más me gusta de este disco,m sino de toda la discográfica de estos hombres. La letra llega dentro del todo "no me abandones nunca más". Ay, la sexta canción. La sexta canción es mi favorita por encima de todas y desde aquí pido al mundo que sea próximo single o que Tarque se presente en el salón de mi casa con una acústica y la toque mil veces seguidas. El ritmo de Ritual me engancha y no puedo parar de tararearla, su letra... Bueno, no tengo nada que objetar sobre la letra. De repente el ritmo baja con la siguiente canción, una lenta, Nadie se acordará de ti. Una canción para cuando estás mal y quieres sentirte peor, cuando estás solo o quieres estarlo. La siguiente sigue la línea de la anterior, suena su voz entre los pocos instrumentos. Solo el viento. Es perfecta para escucharla en tardes de invierno, con lluvia... Va llegando el final del disco y empieza a subir el ritmo de nuevo, suena la canción que da título al CD, Arenas movedizas, empieza diciendo algo como "un rio de gasolina y una cerilla en la mano por si decide volver". Para cerrar el disco, no podría haber nada mejor que esta canción. Rock and roll del siglo XXI. Guitarras y bajo, rocanrol, es como un repentino chute de energía muy necesario. 

Y bueno, no creo que haya dicho todo lo que tenía que decir sobre el disco, lo que sí creo que ha quedado claro es que me encanta y que estoy deseando escucharlo en directo. Os pido (obligo y exijo) que lo escuchéis y le prestéis un poco de atención porque merece la pena tanto como los anteriores.

Texto:

martes, 11 de diciembre de 2012

Cinco estrellas.

Crecí (o al menos eso parece) con una idea de "bonito". Cuentos de hadas, princesas, castillos, príncipes azules... Canciones de amor. Alejandro Sanz dominaba en mi casa y mi mundo era un pastel de frambuesa que se tambaleaba de lado a lado buscando alguien de sangre azul. Pero no encontraba mi sitio. Un día así como sin querer escuché una de las canciones más bonitas del mundo "Despacito entro de puntillas por tus piernas, siento frío y me derrito..." y el mundo se paró. Todo lo que creía antes se esfumó, el corazón latía fuerte y estaba muy muy muy rojo, a punto de derretirme el pecho. Quizás fue cuando entendí que había encontrado por fin algo que me hacía sentirme más viva que nunca aunque estuviese por el suelo. Hay millones de canciones el el mundo, pero perdonadme que elija cinco como la cumbre de las canciones bonitas. Mis canciones. "Escucha esto, te vas a morir" me dijeron. Y se volvió a parar el mundo y las frases de "Le voy a cobrar a tus labios tus miradas" hacían que temblara. Nunca en mi vida había escuchado nada así, tan perfecto, tan... sin palabras. Pero llegó Robe con su nuevo disco y lo pusieron todo patas arriba, la jodida "Si te vas" es demasiado dolorosa para ser real. No consigo escucharla sin que el corazón me duela hasta el punto de sentir mil agujas clavándose dentro de mi pecho. Y bueno, qué más puedo decir de algo salido del puño de Roberto Iniesta... Lo que sí tengo que decir (y si no lo digo reviento) es que una de las mejores frases que he escuchado en mi vida musical (y no musical) ha salido de los dedos de Lulu. A algunos quizás le parezca una absurda frase más, pero eso es porque os quedasteis en el mundo de las princesas y los castillos. "La veo y se me caen los cojones al suelo". Mientras la mayoría de chicas siguen soñando con encontrar a su príncipe que les diga lo guapas que son y lo enamorados que están de ellas, yo solo sueño con que alguien, algún día, sea capaz de decirme algo así, tan simple y tan real que me deje sin respiración. Por esto y más "Dueña de mis resacas" está en esa lista de canciones. Pero bueno, siempre hay una que destaca, no sabes muy bien por qué, pero lo hace. Es como la reina de las canciones, ahí arriba en un pedestal, escrita por lo que bien podría ser un estilo de Dios musical. "Duerme conmigo" es para mí la mejor canción que hay en el mundo (y me arriesgo a decirlo a sabiendas de que hay millones que no he escuchado ni escucharé). ¿Cómo unos pocos minutos pueden encerrar algo tan bonito? ¿Cómo alguien puede decir algo tan bonito? Bonito, para mi. Y es en los momentos en los que escucho esa canción es cuando pienso que, realmente, no debe haber nadie en este mundo que no se quede colgado de ella. Si no es así, es solo porque ignoran su existencia, tanto de esta como de las anteriores. Por eso estoy aquí contando esto, porque si gracias a mi alguien puede sentir lo mismo que yo siento cada vez que escucho estas canciones, seré un poco más feliz.

Texto:
Isa @MgFluorescent

Música.

Yo debería estar escribiendo sobre el último disco de MClan. Pero no es así. Por una serie de catastróficas desdichas (básicamente que me he quedado sin internet) no voy a poder hacerlo hasta el fin de semana. Y diréis "a mi qué me importa" o "qué tiene que ver esto con la música". Bien. Llevo casi una semana sin escuchar mi dosis diaria de música. Me va a explotar el corazón en mil pedazos y os voy a salpicar como esto siga así. Cada día que pasa me aseguro más de que en mis venas no corre sangre, sino música (aunque no sé si esto es del todo posible) y lo necesito casi igual que respirar. No entiendo la vida sin despertarme por las mañanas y poner Marea o acostarme con Love of lesbian en mis oídos, y lo mejor es que casi todas las personas que he conocido y merecen la pena ha sido gracias a la música. Le debo tanto que nunca sabré como agradecer al mundo su existencia. Esto es todo lo que me da tiempo a contar sobre mi amor por la música. Otro día, más.

Texto:
Isa @MgFluyorescent

viernes, 7 de diciembre de 2012

El rock andaluz vivirá mientras viva Albertucho


No se puede ser andaluz, tocar el banjo y la pandereta, llamar a tu disco Alegría, ponerle un color amarillo epiléptico a la portada... y no molar. Albertucho es la salsa de cualquier lista de reproducción.


Lo descubrí, más o menos, hace dos años, con la que ahora es mi favorita por encima de todas: El Pisito. No sé qué es, pero tiene algo que te atrapa desde la primera vez que suena. Desprende alegría, buen rollo y ganas de vivir desde el primer acorde hasta el último y eso hace mucha falta.
Pero no escribo para hablar de una canción de su primer disco, no. Todo esto viene a que hace, aproximadamente ,un mes salió a la venta Alegría. Si Palabras del Capitán Cobarde ya me gustó –sin ser mi favorito- este me ha volado la cabeza. 
Empieza con una canción que le da nombre al disco. La letra resume lo que -según dijo en la presentación- significa para él la Alegría, "alegría, no paro de partirme la camisa; alegría, para encontrar la fuente de tu risa; alegría, pero eres encarnada rebeldía; alegría, matando la tristeza te haces vida...". Sigue con una canción de esas que hacen que te quieras levantar de la silla y ponerte a bailar: Muertecito Estoy De Ganas. Dos semanas tardé en dejar de tararearla todo el día. Una de las mejores, sin duda. Continúa con Deja de Mandar (corazón extraño...) y Tiene Que Haber De Tó, dos canciones sencillas y directas, sin adornos. Luego la quinta, Vida Sin Reloj, y sí, ojalá una vida sin reloj, sin prisas, sin atascos... "Nos juntábamos cantando en el patio los naranjos, tiraditos al calor...". Todo esto para llegar a la que, para mí, es LA canción: La Gravedad De La Teoría. No sé qué más decir de ella aparte de lo mucho que me gusta. Más adelante, Somos Pájaros (que vuelan hacia una luz, pero ¡yo soy más pájaro que tú!). Después, Mi Compadre, historia de un hombre que tiene sed de corazón. La siguiente es No Tener Nada con una gran, gran frase "si sueñas lo que quieres, siempre es más de lo que tienes. Será mucho mejor no tener nada". Luego viene Superhéroe de Sillón, una canción con la que me siento terriblemente identificada. La siguiente es Él No Murió y debo decir que me hace infinita gracia, ¿quién dijo que todas las canciones tenían que hablar de amor? Esta es la última del disco físico, pero en Internet podemos escuchar una que dice "tengo una misión certera, es mi misión perfecta: vengo a registrarte el corazón...".

Si después de leer esto se alinean los planetas y decidís escuchar el disco, probad con un directo suyo. Acojonante.



"Tanto en el sur de California como en el sur de Rusia, siempre hay un gilipollas con un banjo. Y el de Sevilla soy yo"  




Fotos y texto:                                                                                                                               
Marta @Killmys0ul

martes, 4 de diciembre de 2012

Su amor en mis venas.

La cosa va de un sábado 24 de Noviembre no demasiado frío. Mi afán por la(s) primera(s) fila(s) no puede ser de este mundo, así que a las 19:00h llegando a la puerta de la sala ya estaba con las palabras "ya verás qué cola" en la boca cada 10 segundos. Giro la esquina y veo como mucho a 20 personas bebiendo cerveza y riendo, pienso: "Está bien, ¿segunda fila? No puedes pedir más." Y es entonces cuando mi mente se relaja y empiezo a fumar como una posesa por culpa de los nervios preconciertiles. Supongo que todo el mundo conoce esos nervios, el "qué cantará", "qué llevará puesto" y "ayseñorquelesvoyaver" son las únicas cosas que se me pasan por la cabeza en la cola de cualquier concierto al que me presento.
Entramos y esperamos. La misma espera infinita de todos los conciertos, mirando a la gente de mi alrededor y al escenario. Por fin suena la introducción y ay, ese cosquilleo sube por mi barriga y cuando me quiero dar cuenta ya estoy saltando, qué bonitos y aunque he de reconocer que empezaron con una de las canciones que menos me gusta del cd, me alejé completamente de mi misma y disfruté, sin más. El momento "majareta" fue demasiado bonito para ser real, mi sonrisa debía salirse de mi cara, me dejé la garganta y la vida en sus canciones. Me maldije en "Fauna rara" al no haber llevado nada gracioso que ponerme y en por verte sonreír se me vino Marto alguien a la cabeza en seguida. También me dejé la mano de tanto estirarla para conseguir una de las flores que repartió al cantar "la flor" pero malditas zorras me quedé sin flor, sin púa, sin baqueta y sin nada de nada de estos señores. Me queda el recuerdo y las sensaciones que de nuevo me hicieron sentir, la felicidad extrema que no soy capaz de conseguir de cualquier otra manera, la obtengo en un concierto.
Se encienden las luces y siento como un vacío dentro, como que me han quitado un pedazo de mi y se ha quedado ahí en la sala guardado para siempre. Salgo y no me puedo creer lo que he vivido durante las dos cortas horas que acaban de pasar volando. ¿Ya está? ¿Ahora qué? ¿Se acabó? Solo queda repetir lo vivido millones de veces en mi cabeza, escuchar las canciones, cerrar los ojos y transportarme al lugar donde pase lo que pase fuera, soy feliz.


Isa @MgFluorescent

lunes, 3 de diciembre de 2012

Despegamos

Nos gusta la música. 
Esa es la principal razón por la que esto existe. No tocamos ningún instrumento, ni sabemos solfeo, ni pretendemos dar ninguna lección a nadie. Nos gusta la música, los músicos y, ante todo, las canciones. Queremos que todas nuestras conversaciones sobre conciertos, grupos, señoresbonitos y demás, pasen a ser algo un poco más real. Ante todo, somos fans, y lo que siente un fan al salir de un concierto no es lo mismo que lo que siente un crítico musical, ni mucho menos. Y aquí, señores, vamos a pecar de fans hasta el fondo.
Como dice una gran película, los que estamos en el foso chillando, saltando y coreando nuestros himnos, somos las banderas de las bandas.
Nosotras nos abrazamos por primera vez el día que uno de los grupos de nuestras vidas decía adiós. Hemos llenado tardes enteras viendo Las Putas Más Viejas Del Mundo desde dos sofás separados por muchos kilómetros. 

Y yo sólo sé que si hay algo que une a la gente, eso es la música.